Vuelta al cole: ¿Qué medidas debemos contemplar para un regreso tranquilo y sin colapsos?
Si bien el cierre de las escuelas fue producto de la situación sanitaria que afectó y sigue afectando a toda la población, también ha tenido consecuencias negativas tanto para la salud, como para la educación y el desarrollo infantil.
Debido al comienzo de clases de primaria y secundaria en todo el país, en diferentes localidades anunciaron que la vuelta a las aulas será sin las medidas sanitarias que rigieron durante los meses de presencialidad del 2021. Es por ello que resulta de suma importancia saber cuáles son los cuidados que se deben tener en cuenta y respetar por parte de los alumnos y el cuerpo docente para que el año lectivo transcurra con tranquilidad y sin colapsos en el sistema educativo y sanitario.
Sabemos que la escolaridad de manera presencial trae beneficios sociales, emocionales y psicológicos para los niños y niñas, además de continuar con la formación educacional, en donde se refuerzan los valores, enseñanzas y hábitos básicos que son aprendidos desde casa. Sin embargo, no debemos perder de vista que el virus del COVID-19 sigue entre nosotros y, por ello, es necesario seguir cuidándonos para garantizar la seguridad, tanto de los niños y de sus familias, como la de todo el personal escolar.
En este sentido, para que el regreso a las aulas sea seguro es recomendable que las personas que asistan a un centro educativo tengan presente respetar las medidas establecidas por la institución y seguir las recomendaciones brindadas tanto por los gobiernos nacionales, provinciales y locales.
Consejos útiles para cuidarse en clase:
Además de las medidas establecidas por cada institución, comparte una serie de medidas de prevención para que puedan poner en práctica los chicos antes de salir de casa, mientras se encuentran en la escuela y cuando regresan a sus hogares:
– Efectuar una correcta higiene de manos con agua y jabón o con alcohol en gel. Esta se debe realizar: Antes de salir de casa y al llegar al colegio.
– Antes y después de los recreos, de comer o tocar alimentos, de ir al baño o de tocar dinero, animales o superficies comunes.
– Luego de toser, estornudar o sonarse la nariz.
Utilizar correctamente el tapabocas si en el establecimiento educativo determinan su uso obligatorio durante toda la jornada: este debe cubrir la nariz, la boca y el mentón:
– El uso de tapabocas está exceptuado durante las actividades físicas y para niños menores de 2 años de edad.
– Se recomienda que los niños de 3 a 5 años lo utilicen durante el tiempo que sea posible.Llevar un tapabocas adicional en la mochila y una botella de agua personal.
– Toser y estornudar en el pliegue del codo o usando pañuelos descartables.
– Evitar tocarse la cara.
– Llevar a clase solamente los útiles necesarios e identificados con nombre para evitar confusiones.
– En caso de tener que ausentarse en el colegio por motivos de COVID-19 avisar al colegio inmediatamente.
Además de los cuidados contra el COVID-19 es necesario tener en cuenta los cuidados que se deben tener todos los años a la hora de comenzar un nuevo ciclo lectivo como por ejemplo la vacunación y la importancia que tienen en el organismo de las personas.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las vacunas se definen como una preparación destinada a generar defensas contra una enfermedad estimulando la producción de anticuerpos. Por tal motivo, su desarrollo sirve para la prevención de enfermedades producidas por virus y bacterias, permitiendo salvar millones de vidas y generando un importante impacto en la salud pública a nivel mundial.
Los niños son especialmente susceptibles a las enfermedades. Cuando ingresan a la vida escolar se amplía el universo de personas con las que entran en contacto y suelen compartir objetos todo el tiempo sin lavarse adecuadamente las manos, aunque lo recomendable sería que se laven las manos con frecuencia y que cada uno utilice sus útiles escolares. Por eso es importante que se continúe el esquema de vacunación de los niños y niñas, para evitar diversas enfermedades infecciosas que pueden ser sumamente graves.
Entre las vacunas que se aplican al inicio de la escolaridad (entre los 5 y 6 años) se encuentran:
– La vacuna contra la Poliomielitis.
– La vacuna Triple viral (contra el sarampión, la rubéola y las paperas).
– La vacuna Triple Bacteriana Celular (contra la difteria, el tétanos y la tos convulsa).
Y a los 11 años se aplican:
– La vacuna contra la Hepatitis B.
– La vacuna Triple viral.
– La vacuna Triple bacteriana acelular (la difteria, el tétanos y la tos convulsa).
– La vacuna contra el HPV.
– La vacuna antimeningococo tetravalente.
– La vacuna contra la Fiebre amarilla.
La vacunación es la mejor forma de protección para prevenir enfermedades infecciosas mortales, permitiéndonos tener hoy una mejor calidad de vida y un riesgo exageradamente disminuido de contraerlas.
Con respecto a la vacunación contra el COVID-19 se recomienda consultar siempre con su pediatra de cabecera para despejar dudas con respecto a esto y establecer las mejores medidas de prevención para los infantes.